Debido a la pandemia del Covid-19 las personas que venden velas para la celebración del día del niño perdido registran bajas ventas, esto debido a que la población por la falta de dinero prefiere ahorrar a gastar en un producto que solo sirve unos cuantos minutos, por lo que los comerciantes señalan que todos se están viendo afectados por esta situación.
De acuerdo con los comerciantes las ventas están hasta en un 20 por ciento, pues los proveedores con los que ellos trabajan no surtieron porque sabían que no estarían vendiendo como en años anteriores y no prefirieron arriesgarse a comprar ejn producto que la mayoría de las familias no iban a comprar, por lo que algunos de los han tenido que bajar sus precios para poder seguir vendiendo.
Asimismo mencionaron que que este año la producción de velas también se ha visto afectada por lo que muchos negocios no cuentan con el producto además de que el que hay ha salido de muy mala calidad, es por este motivo que han buscado otros productores para que les surtan pero han tenido que incrementar el costo de estos.
Destacan que ha sido un año complicado para todos ya que debido a la pandemia se han generado varias restricciones las cuales se han visto afectados todos los comerciantes, por lo que sus ventas han caído hasta un 90 por ciento por lo que esperan que el próximo año pinte diferente y que tengan más posibilidades de mejorar sus ventas.
Esta festividad solo se conmemorar en la zona norte del estado, que de acuerdo a los escritos bíblicos las velas se encienden para recordar este pasaje e iluminar el camino de Jesús y ayudarle a regresar a casa, aunque también hay quienes piensan que las velas encendidas sirven para encontrar a los niños extraviados, ayudarlos a regresar a casa, así como sucedió con el Niño Jesús por lo que cada siete de diciembre las calles se iluminan.
