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Hace tres semanas fue reportada una fuga en el Fraccionamiento los Mangos, sin que personal de la Comisión de Agua de Veracruz (CAEV), en Poza Rica, se haya aparecido para reparar el desperfecto. El domingo pasado se presentaron dos trabajadores a la casa marcada con el número 63 de la calle Framboyán, solo para impedir que los propios vecinos intentaran detener el criminal desperdicio de agua.
Desde hace tres semanas, cuando se registró la fuga, la señora Carmen Rodríguez Cisneros se presentó ante el departamento correspondiente, en el tercer piso de las oficinas de CAEV para reportar el hecho. La mujer que la atendió solo se limitó a decir que atenderían el caso, pero se negó a ver las fotografías del derrame que la quejosa llevaba en su celular.
Pasaron dos semanas y ante el criminal desperdicio de agua que genera la fuga, el pasado domingo 22 de abril, los propios vecinos intentaron reparar el desperfecto. Cuando ya habían roto la banqueta y escarbado en torno a la fuga, llegaron dos hombres, que dijeron ser trabajadores de CAEV.
Estos señores advirtieron, a los improvisados fontaneros, que si seguían haciendo el trabajo (que le corresponde hacer a los empleados de la comisión de aguas) tuvieran mucho cuidado porque si causaban más daños, quienes pagarían todos los desperfectos serían los propios afectados por la fuga, o sea los vecinos que se esforzaban, en ese momento, por resolver el problema que CAEV no atendía.
Luego de esto los empleados dijeron que reportarían la fuga y se fueron tan campantes, como los vecinos no querían que se les acharan los daños que pudieran causar, debido, reconocieron, a su escasa habilidad como plomeros, decidieron esperar a que CAEV reparara la fuga.
Cabe destacar que el agua llega a Los Mangos los días jueves y domingo, así que este 29 de abril llegó el líquido y comenzó a derramarse, porque los empleados de CAEV no tuvieron tiempo, en una semana, de reparar el daño.
