*Cientos de devotos participaron desde temprano en bendiciones, ofrendas y celebraciones tradicionales.
Poza Rica, Ver.- La llegada de cientos de familias a la colonia Manuel Ávila Camacho marcó una jornada de intensa actividad en torno a la Parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe, donde desde muy temprano comenzaron a reunirse grupos de devotos para participar en las celebraciones guadalupanas.
Las calles se fueron llenando de niños y niñas caracterizados como Juan Diego e “inditas”, quienes, acompañados por sus padres, avanzaban rumbo al templo para recibir la bendición especial del párroco.
A lo largo de la mañana, el entorno del templo se convirtió en un punto de encuentro comunitario, donde predominaron las muestras de devoción, el intercambio de ofrendas y la participación de familias enteras que acudieron para renovar sus creencias y agradecer favores atribuidos a la Virgen morena.
El atrio de la parroquia reunió a fieles que permanecieron en oración, encendiendo veladoras y entonando cantos mientras recordaban la historia guadalupana que ha marcado a generaciones en todo el país. Entre el sonido de las mañanitas y el murmullo de plegarias, el lugar se convirtió en un espacio para la reflexión y el agradecimiento.
Con el paso de las horas, la celebración se consolidó como un recordatorio del peso cultural y espiritual que conserva esta tradición, reforzando la identidad de la comunidad y el vínculo que las familias mantienen con sus creencias.


