Ante una imparable ola de robos en la zona centro de la ciudad, comerciantes han decidido tomar cartas en el asunto y lanzar una advertencia clara a los delincuentes: quien sea sorprendido cometiendo fechorías tendrá que atenerse a las consecuencias.
Como muestra de su hartazgo, locatarios colocaron lonas en las afueras de los mercados del centro, dejando constancia de su preocupación por los constantes asaltos registrados en los últimos meses.
Los comerciantes señalaron que su objetivo es garantizar la seguridad de la población, pues temen que, de continuar los robos, los ciudadanos dejen de acudir a la zona para realizar sus compras, afectando así sus ventas e ingresos.
La estrategia, denominada “Comerciantes Vigilantes”, busca reducir los atracos, que en su mayoría son perpetrados por carteristas, lo que dificulta su identificación al no actuar con violencia.
Pese a los rondines de la policía municipal, los comerciantes consideran que deben actuar de inmediato para evitar que la zona se convierta en un lugar peligroso. Por ello, han decidido unirse en esta campaña, enviando un mensaje firme a la delincuencia: en el centro de la ciudad, la impunidad no será tolerada.
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