A pesar de que autoridades municipales, jefe de sector y supervisores asistieran a dialogar con los padres de familia que mantienen tomadas las instalaciones de dos instituciones en la localidad de Francisco I. Madero en el municipio de Papantla, habitantes señalan no tener respuestas concretas.
En el caso específico de la escuela primaria de este lugar, los padres de familia exigen un docente efectivo pues afirman que es incorrecto que los menores tomen clases impartidas por un maestro que atienda dos grupos a la vez, por lo que las autoridades presentes afirmaron que a principios de la próxima semana ya estaría llegando un nuevo maestro a la institución.
Cabe destacar que la comunidad ya mencionada es la única en todo el estado que se ha tomado la iniciativa de manifestarse en dos planteles educativos a la misma vez. Algunos pobladores del lugar quienes no tienen hijos en las escuelas se han solidarizado con este movimiento.
En cuanto a la secundaria general se prevé que el problema continuará durante algunos días más, la tarde del jueves diez de octubre Gregoria Sánchez Lima, supervisora escolar interina acudió a las afueras de este plantel.
Los más de cien padres de familia escucharon la información que Sánchez Lima trajo consigo, en la cual afirmó que ya se está trabajando por qué las horas que faltan por cubrir en la secundaria sean cubiertas por docentes efectivos.
No obstante los padres de familia aseguraron que de nada cambiará que la supervisora les afirme que llegarán los maestros, pues hasta no ver a los efectivos con el documento que avale que fueron asignados a la escuela no desistirán este movimiento.
En entrevista exclusiva para este medio de comunicación, Gregoria Sánchez Lima, expresó que desde su trinchera en la supervisión se continuará con el trámite de lo que solicitan los habitantes de este lugar.
Para finalizar los padres de familia, aseguraron que de no tener una respuesta en lo que va del día de mañana, viajarían hasta las instalaciones de la Secretaría de Educación Pública(SEP) en Xalapa tomar las instalaciones y ejercer presión para ser escuchados.
