No hay descanso para el flamante número 1 del tenis de hombres.
Apenas horas después de celebrar su primer título de Grand Slam en el Abierto de Estados Unidos, Carlos Alcaraz regresó a España para ayudar al país en la Copa Davis.
“Estoy muy orgulloso de llegar como número uno. Jugar la Davis es especial, un ambiente único”.
El tenista de 19 años dijo el martes que se siente “muy orgulloso de llegar como número uno y aportar mi granito de arena al equipo. Jugar la Davis es siempre especial, es un ambiente único y tengo muchas ganas de estar con el equipo”.
Alcaraz llegó a Valencia el día antes de que España debute cintra Serbia en la fase de grupos.
No estaba claro aún en que condición arribó, tras haber jugado una intensa serie de partidos en camino al cetro en Nueva York.
El capitán de España Sergi Bruguera dijo: “No puedo confirmar si Carlos estará para jugar el miércoles hasta que llegue, veremos cómo está y hablemos con él”.
Muchos conjeturaban que Alcaraz no participaría en la Coa Davis tras vencer a Casper Ruud en la final del Abierto de Estados Unidos el domingo, que lo que le hizo el hombre más joven en liderar el ranking computarizado de la ATP desde que comenzó en 1973.
Luego de la tradicional sesión de fotos en Times Square el lunes, Alcaraz dijo que se despertó muerto de cansancio tras la final de cuatro sets contra Ruud.
“Esperamos que se pueda recuperar pronto para jugar”, dijo Bruguera.
Antes de la final, Alcaraz tuvo tres victorias consecutivas en cinco sets, incluyendo un partido de 5 horas y 15 minutos en cuartos contra Jannik Sinner.
“Todos sabíamos que iba a ocurrir tarde o temprano”, dijo Bruguera. Pero la manera de ganar tres partidos en cinco sets requiere un gran esfuerzo mental y físico. Y no hay palabras para describir cómo ha llegado a ser el más joven número uno del mundo de la historia.”
Tras medirse con Serbia, que estará sin Novak Djokovic, España se mide con Canadá el viernes y Corea del Sur el domingo en el Grupo B. Ls dos mejores equipos de cada grupo avanzan a cuartos de final, que se jugarán en noviembre en la ciudad española de Málaga.
Alcaraz estuvo en el equipo español pro primera vez el año pasado, pero tuvo que retirarse del torneo tras dar positivo de coronavirus apena antes del arranque.
“Es un orgullo representar a España en todos los lados”, dijo. Pero “acabo de llegar, tengo que instalarme y ya veremos”.
